Avanza recibe el sello de Excelencia Europea EFQM 500+

Valentín Alonso, director General de Avanza, recibió de manos de Ignacio Babé, CEO de Club Excelencia en Gestión, este reconocimiento que distingue a todas aquellas empresas que trabajan para mejorar su sistema de gestión.

Avanza ha obtenido el Sello de Excelencia Europea EFQM 500+, un reconocimiento con el que la empresa de movilidad global contribuye a que España mantenga el liderazgo de Excelencia en Europa. Con este reconocimiento Avanza también afianza su compromiso por la adopción de buenas prácticas de gestión, así como por la mejora continua de sus procesos de negocio, redundando en la satisfacción de sus clientes.

Reconocimiento a la gestión

Valentín Alonso, director General de Avanza, recibió el Sello, en las instalaciones centrales de Avanza en Madrid, de manos de Ignacio Babé, CEO del Club Excelencia en Gestión, en un acto en el que Alonso se mostró muy satisfecho por la concesión. “El Sello EFQM es la única certificación internacional que reconoce la gestión excelente, innovadora y sostenible de las organizaciones. Haber conseguido el sello 500+ ha supuesto un exigente reto que ha premiado nuestra trayectoria y transformación continua hacia la excelencia, aportando valor no sólo a nuestra propuesta diferenciadora, sino también mejorando la calidad de vida de nuestros clientes y fomentando las mejores prácticas e iniciativas hacia nuestros stakeholders”, reconoció.

Referente en movilidad

“Este certificado EFQM nos consolida como un referente en el sector de la movilidad y nos anima a seguir construyendo un camino sólido hacia la excelencia, siendo un elemento de prestigio que respalda nuestra transparencia y buen hacer”, subrayó Alonso.

Sello de gran prestigio internacional

El Modelo EFQM goza de gran prestigio y reconocimiento internacional. Se utiliza en miles de organizaciones de todo el mundo, tanto en el sector público como privado, para mejorar su gestión, rendimiento y calidad. La Fundación Europea para la Gestión de la Calidad (EFQM, por sus siglas en inglés) fue establecida en 1988 por un grupo de CEOs de grandes empresas europeas con el objetivo de mejorar la competitividad de la industria europea. Aunque inicialmente fue un modelo europeo, su utilidad y valor para la mejora de la calidad y la gestión ha llevado a su adopción en muchas organizaciones fuera de la Unión Europea.

La evaluación EFQM aporta prestigio, confianza, competitividad, aprendizaje y compromiso. Además, analiza cada uno de los aspectos clave de la organización, identifica aquellos aspectos positivos en los que la organización debe apoyarse y aquellos en los que tiene una oportunidad de mejora, proporciona una puntuación que sirva de referencia útil para facilitar la comparación con otras organizaciones y el aprendizaje de las mismas, en cada uno de los puntos clave, ayuda a establecer las prioridades donde actuar y anima a la organización a seguir mejorando y avanzar en el proceso de transformación.